JAVIER GRANDA REVILLA | elconfidencial.com | 19/07/2025
Un nuevo estudio recalca que el riesgo genético para los trastornos del estado de ánimo interactúa con factores ambientales
Una revisión integral de decenas de estudios ya publicados ha servido para
aclarar el papel de los marcadores genéticos en los trastornos
del estado de ánimo y cómo influyen en los resultados del tratamiento y las
características clínicas en las principales enfermedades psiquiátricas.
El análisis, publicado en la revista científica Genetic Psychiatry, revela
que, aunque las puntuaciones poligénicas actualmente muestran un poder
predictivo modesto, demuestran patrones consistentes que eventualmente podrían
contribuir a una atención psiquiátrica más personalizada. Estas puntuaciones
son estimaciones de riesgo de desarrollar una enfermedad específica,
basadas en la información genética de cada paciente.
La investigación ha sido realizada por el profesor
Alessandro Serretti de la Universidad Kore de Enna en Sicilia, Italia:
analizó estudios que abarcan desde 2013 hasta 2025, examinando
cómo las puntuaciones poligénicas para el trastorno depresivo mayor y el
trastorno bipolar se relacionan con los resultados del tratamiento.
La revisión encontró que las puntuaciones
poligénicas más altas para la depresión se correlacionan
consistentemente con peores resultados de tratamiento en múltiples
trastornos. Así, los pacientes con riesgo genético elevado para la depresión
mostraron mayor probabilidad de no tener respuesta a medicamentos como
antidepresivos, estabilizadores del estado de ánimo, antipsicóticos. Además,
tenían menores tasas de remisión y mayor resistencia al tratamiento en
depresión mayor, trastorno bipolar y esquizofrenia. Este patrón se mantuvo en
poblaciones diversas y enfoques de tratamiento, sugiriendo una relación
biológica genuina más que un artefacto estadístico.
"La mayoría de
los estudios apuntan a una relación modesta pero consistente entre las
puntuaciones poligénicas de trastorno depresivo mayor y los resultados del
tratamiento antidepresivo", señaló el Profesor Serretti. "Una mayor
carga poligénica para la depresión se correlaciona con una mayor probabilidad
de no respuesta, no remisión o resistencia a las terapias antidepresivas
convencionales".
Además, el efecto perjudicial se observó, aunque con evidencia menos
sólida, también para los resultados del tratamiento del trastorno
bipolar y la esquizofrenia.
Las puntuaciones poligénicas para el trastorno bipolar mostraron efectos
más matizados: mientras que estos marcadores demostraron valor predictivo
limitado para la respuesta a antidepresivos en la depresión unipolar,
revelaron patrones intrigantes en el tratamiento del trastorno bipolar.
Por un lado, puede asociarse con mejores resultados educativos o mayor
funcionamiento cognitivo; por otro, puede predisponer a dimensiones psicóticas
en contextos específicos.
Esta evidencia destaca cómo la susceptibilidad genética al trastorno
bipolar no confiere resultados negativos de manera uniforme y
puede, en algunos contextos, ser ventajosa.
Influencia de los
factores ambientales
El análisis
descubrió evidencia convincente de que el riesgo genético para los trastornos
del estado de ánimo interactúa con factores ambientales. Los estudios mostraron
consistentemente que individuos con mayor riesgo genético para la depresión
reportaron mayor exposición a eventos vitales estresantes y demostraron mayor
vulnerabilidad a condiciones ambientales adversas.
Por el contrario, el riesgo genético para el trastorno bipolar a veces se
asoció con resultados positivos, incluyendo mejores resultados educativos y
mejor rendimiento cognitivo en ciertas poblaciones. Esta dualidad refleja
la complejidad de la genética psiquiátrica, en la que las
mismas variantes genéticas pueden conferir tanto riesgos como ventajas,
dependiendo del contexto.
¿Podrían estas
interacciones gen-ambiente explicar por qué algunos pacientes con perfiles
genéticos similares experimentan trayectorias clínicas tan diferentes? La
investigación sugiere que la susceptibilidad genética puede
influir no solo en el riesgo directo de enfermedad sino también en la probabilidad
de encontrar estresores ambientales que modifiquen aún más los resultados.
A pesar de los hallazgos consistentes, la utilidad clínica
de las puntuaciones poligénicas actuales sigue siendo limitada.
Incluso cuando son estadísticamente significativos, estos marcadores genéticos
típicamente explican menos del 1% de la varianza en los resultados del
tratamiento.
El Profesor Serretti ha recalcado que las puntuaciones poligénicas
deberían considerarse actualmente como marcadores predictivos
incrementales más que como herramientas de decisión
clínica. "Aunque estas puntuaciones son prometedoras, su poder explicativo
adicional más allá de los predictores clínicos convencionales a menudo
permanece marginal", ha indicado.
Investigación
basada en datos de Europa
La revisión destacó
una limitación crítica en la investigación actual: la mayoría de los estudios
de asociación del genoma completo que subyacen a estas puntuaciones
poligénicas se han realizado en poblaciones de ascendencia europea. Esto crea desafíos
significativos para implementar la predicción genética en poblaciones del resto
del mundo,
Estudios recientes en poblaciones asiáticas, particularmente muestras Han
chinas, han mostrado direcciones de efecto ampliamente consistentes para las
puntuaciones poligénicas de depresión. Sin embargo, las diferencias entre
poblaciones pueden alterar sustancialmente la precisión predictiva cuando se
aplican puntuaciones derivadas de muestras europeas en otros lugares. Por este
motivo, el trabajo recalca la necesidad de realizar estudios grandes y
étnicamente heterogéneos.
Utilidad de la
Inteligencia Artificial
La inteligencia
artificial se está convirtiendo en una gran aliada en este tipo de
estudios, que combinan puntuaciones poligénicas con datos clínicos, usando
técnicas de aprendizaje automático. Así, se ha logrado mejoras sustanciales en
la predicción de resultados: algunos estudios lograron explicaciones de
varianza del 4-5% al integrar información genética y clínica, comparado con
1-2% para marcadores genéticos solos.
El estudio, en su síntesis, muestra varias direcciones de
investigación prometedoras. La más destacada es que los
estudios de asociación del genoma completo en curso con tamaños de muestra más
grandes y métodos estadísticos mejorados están mejorando la precisión de las
puntuaciones poligénicas. Además, los investigadores están desarrollando
enfoques más sofisticados que consideran la heterogeneidad dentro de los
diagnósticos psiquiátricos. La integración con medidas neurofisiológicas,
como biomarcadores de electroencefalograma, y la investigación de interacciones
gen-por-ambiente ofrecen vías adicionales para mejorar la predicción. Algunos
estudios han comenzado a explorar también cómo el riesgo genético modula el
impacto del trauma infantil, exposición al estrés y otros factores ambientales
en los resultados psiquiátricos.
Bases futuras
Aunque la
implementación clínica inmediata de estos hallazgos es prematura, esta
investigación establece bases importantes para enfoques futuros de psiquiatría
de precisión. Los patrones consistentes observados en los estudios sugieren que los factores
genéticos influyen de manera genuina en la respuesta al tratamiento, incluso si las
mediciones actuales capturan solo una fracción de esta influencia.
Los hallazgos también destacan la importancia de considerar factores
ambientales junto con el riesgo genético: los pacientes
con alta susceptibilidad genética para la depresión pueden beneficiarse de
intervenciones ambientales más intensivas o monitorización mejorada para la
exacerbación de síntomas relacionados con el estrés.
A medida que mejore la predicción poligénica, estas herramientas podrían,
en un futuro, apoyar la toma de decisiones clínicas a
través de la estratificación del riesgo o la selección del tratamiento. Sin
embargo, tales aplicaciones requerirán investigación adicional sustancial,
incluyendo ensayos controlados aleatorios que demuestren tanto utilidad clínica
como coste-efectividad.
La revisión subraya tanto la promesa como las limitaciones actuales
de los enfoques genéticos para la predicción del tratamiento psiquiátrico.
Aunque las puntuaciones poligénicas para los trastornos del estado de ánimo
muestran asociaciones consistentes con los resultados clínicos, traducir estos
hallazgos a la práctica clínica rutinaria requiere avances metodológicos
continuos, expansión de la diversidad ancestral e integración con evaluación
clínica integral.