JUDITH R. IGLESIAS | diariodesevilla.com | 27/07/2025
Es importante esperar a que sea un momento en el que se sientan relajados y participar en la conversación como un oyente activo, según explica UNICEF
La adolescencia es una etapa llena de emociones y reflexiones, de gran importancia
para acercarnos a la vida adulta. Sin embargo, la cantidad de cambios físicos y
psicológicos que se producen durante estos años, hacen de ella un proceso
complejo, en el que la comunicación entre padres e hijos se vuelve imprescindible; tanto para el desarrollo
emocional de la persona como para fortalecer el vínculo familiar.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) la define como la fase que va desde la niñez hasta
la edad adulta (entre los 10 y los 19 años). Durante ese espacio de tiempo,
"los adolescentes experimentan un rápido crecimiento físico, cognoscitivo
y psicosocial, que influye en cómo se
sienten, piensan, toman decisiones e interactúan con su entorno". Ahora
bien, ¿qué papel deben ocupar los padres en todo este proceso?
Cómo hablar con tu hijo adolescente
Sobre este asunto, son muchas las personas que se
preguntan cómo deben hablar con sus hijos; o, más bien, cómo pueden hacer para
que ellos decidan abrirse y revelar las cosas importantes que suceden en su
mundo. La psiquiatra Marian Rojas Estapé explica en el podcast de Erika de La Vega, En Defensa
Propia, la importancia de establecer un canal de comunicación eficaz. "Lo importante es que exista", afirma. Una
vez que eso es así, lo demás llega por sí solo.
"Hay momentos en los que queremos hablar con
nuestro hijo adolescente, sentarlo en frente y preguntarle "¿cómo
estás?". Y ese hijo adolescente se siente observado, juzgado, mirado,
escudriñado...", explica la especialista. Sin embargo, la clave está en
esperar a que se dé el momento. "Por ejemplo, vas en el coche conduciendo
y te dice lo que nunca te dirá mirándote a los ojos". Es entonces cuando
hay que aprovechar la ocasión. "Busca una ventana de oportunidad".
"Una oportunidad es que no haya contacto visual,
ya sea conduciendo, cocinando, coloreando... porque se relajan y empiezan a
hablar", añade la neuropsicóloga pediátrica Carina Castro, también invitada al podcast. Además, es importante
escuchar y dejar que sean ellos los que lleven el ritmo de la conversación. Por
lo tanto, su consejo es contar hasta 30 antes de empezar a hablar, en lugar de
interrumpir a los 10 segundos. "Es mucho más importante generar la
carretera a que tú generes el contenido. El tema es que ese canal de
comunicación exista",
concluye Marian Rojas.
Consejos para una mejor comunicación
La comunicación es clave para fortalecer los lazos
familiares y también para el bienestar de nuestros hijos. Por ello, es
importante construir esta relación como un oyente activo, que presta atención y se interesa por aquello que le
sucede o le preocupa. "Establecer una conexión con nuestros hijos es la
base de su bienestar mental y su aprendizaje social y emocional", sostiene
UNICEF.
Mostrarse "comprometido, amable, sin prejuicios y
empático, incluso (y especialmente) cuando no se está de acuerdo con
ellos" es fundamental para una escucha activa. Así como también, seguir
una serie de pautas para alimentar la buena comunicación:
·
Mostrar interés en lo que
es importante para nuestros hijos.
·
Compartir cosas sobre uno
mismo e identificar intereses compartidos.
·
Preguntarle su opinión o
perspectiva para comprender qué es lo que siente.
· Aprovechar la comunicación que ya existía desde la infancia. "Si hubo una buena comunicación, compartieron sentimientos y pensamientos, es más probable que este continúe a medida que avanzan en la adolescencia", apunta UNICEF.