lunes, 29 de enero de 2024

Marian Rojas detalla los dos síntomas "clave" para identificar a alguien que es bipolar


Ana Rumí      |   COPE podcast   |    06/01/2024                                    

"El primer síntoma de que algo no va bien es que dejan de dormir. El segundo es que, muchas de esas personas empiezan a beber, hay que tener cuidado con los tóxicos de casa, si empieza a estar arriba hay un estado previo que es la hipomanía. La clave está en la conciencia que tiene el bipolar de su trastorno...

“Si convives con alguien que no cree que lo tenga, es más difícil acompañar que si es consciente de que se tiene que cuidar y tiene ciertas fases" expresaba.

Avisa, eso sí, de que el hecho de que una persona con bipolaridad tenga un día malo, no debe ponerte en alerta, porque está dentro de lo normal. Por eso, es importante identificar ciertos síntomas. "Los familiares viven un poco en alerta para evitar ciertos episodios, cosas del día a día no son síntomas de una recaída" decía la doctora.

Pero, ¿qué pasa si vivimos con una persona con bipolaridad? ¿Cómo debemos actuar?

Así hay que actuar si convives con una persona con bipolaridad

Marian Rojas asegura que es muy complicado tolerar las diferentes fases, porque, especialmente la de la manía, te deja muy "marcado". Por eso, contaba la historia de uno de sus pacientes, que tuvo que sanar después de que su mujer entrara en una de esas fases.

"Una paciente casada con marido e hijos tuvo un episodio maníaco, se puso ropa interior, fue a la oficina y dijo públicamente que se acostaba con cualquier que quisiera... Eso hay que sanarlo después en la familia" decía

Por eso, una de las labores principales que tiene que hacer una persona que convive con alguien con bipolaridad es ejercer "de cuidador". "Si vives con él, tienes que tener aparte, un punto de cuidador, estar pendiente, uno tiene que saber y aceptar, porque sino...

Se compara a la diabetes, si lo cuidas bien, funciona bien y se sostiene bien, “es clave que duerma ocho horas de sueño" recomendaba la doctora.

Y si esa persona eres tú y padeces bipolaridad, es importante que seas consciente de lo que tienes, para que, en cuanto detectas nuevos síntomas de recaída, puedas decírselo y hablarlo con un profesional.                             

"El primer síntoma de que algo no va bien es que dejan de dormir. El segundo es que, muchas de esas personas empiezan a beber, hay que tener cuidado con los tóxicos de casa, si empieza a estar arriba hay un estado previo que es la hipomanía. La clave está en la conciencia que tiene el bipolar de su trastorno...

“Si convives con alguien que no cree que lo tenga, es más difícil acompañar que si es consciente de que se tiene que cuidar y tiene ciertas fases" expresaba.

Avisa, eso sí, de que el hecho de que una persona con bipolaridad tenga un día malo, no debe ponerte en alerta, porque está dentro de lo normal. Por eso, es importante identificar ciertos síntomas. "Los familiares viven un poco en alerta para evitar ciertos episodios, cosas del día a día no son síntomas de una recaída" decía la doctora.

Pero, ¿qué pasa si vivimos con una persona con bipolaridad? ¿Cómo debemos actuar?

Así hay que actuar si convives con una persona con bipolaridad

Marian Rojas asegura que es muy complicado tolerar las diferentes fases, porque, especialmente la de la manía, te deja muy "marcado". Por eso, contaba la historia de uno de sus pacientes, que tuvo que sanar después de que su mujer entrara en una de esas fases.

"Una paciente casada con marido e hijos tuvo un episodio maníaco, se puso ropa interior, fue a la oficina y dijo públicamente que se acostaba con cualquier que quisiera... Eso hay que sanarlo después en la familia" decía

Por eso, una de las labores principales que tiene que hacer una persona que convive con alguien con bipolaridad es ejercer "de cuidador". "Si vives con él, tienes que tener aparte, un punto de cuidador, estar pendiente, uno tiene que saber y aceptar, porque sino...

Se compara a la diabetes, si lo cuidas bien, funciona bien y se sostiene bien, “es clave que duerma ocho horas de sueño" recomendaba la doctora.

Y si esa persona eres tú y padeces bipolaridad, es importante que seas consciente de lo que tienes, para que, en cuanto detectas nuevos síntomas de recaída, puedas decírselo y hablarlo con un profesional.

 Nota.- Es un resumen, el audio dura poco más de 8 minutos y es muy interesante.

 

Cúal es la primera pregunta que debemos hacer a los hijos después del colegio, según Harvard


El Debate     |     15/01/2024

Lo revelan varios psicólogos y expertos en crianza de Harvard

Los casos de ansiedad y depresión entre jóvenes y adolescentes ha aumentado significativamente en los últimos años, marcando una realidad antes poco explorada y minimizada en términos de salud mental y emocional. Ante esta realidad, cada vez más creciente, han ido surgiendo distintos estudios de instituciones destacadas como Harvard han arrojado luz sobre estos fenómenos.

Expertos señalan que muchos trastornos emocionales encuentran su origen, o se agravan, en la dinámica entre padres e hijos. En este contexto, una investigadora experta en terapia familiar de Harvard propone un innovador enfoque comunicativo que no solo mejore la interacción, sino que también prevenga el desarrollo de dichos trastornos.

Jennifer Breheny Wallace, periodista e investigadora sobre paternidad graduada de Harvard, tiene una sugerencia que, si bien luce sencilla, podría ser el primer paso para un cambio total en el paradigma: cambiar la pregunta de bienvenida cuando los hijos ingresan a casa.

En conversación con la CNBC, Wallace resalta que muchos de los padres suelen recibir a sus hijos con preguntas relacionadas con la escuela, cuestiones como «¿Cómo fue esa prueba?», o «¿Estás listo para ese gran examen?». Unas preguntas que estarían ligeramente equivocadas y que deberían ir dirigidas a «liderar con el almuerzo».

En su libro Nunca es suficiente: cuando la presión por el logro se vuelve tóxica y qué podemos hacer al respecto, la escritora destaca que la presión puede convertirse en un arma, en lugar de un apoyo.

«Cuando mis hijos entran por la puerta, en lugar de preguntarles: '¿Cómo te fue en el examen de español?', lo cual solía hacer antes de escribir el libro, ahora les pregunto: '¿Qué almorzaron?'. Hablo de cosas que no tienen nada que ver con sus logros», comentó la experta.

La involucración, un arma de doble filo

Contrariamente a la creencia común, los padres más involucrados pueden ser los causantes de mayor impacto negativo en sus hijos, especialmente cuando la presión proviene del ámbito educativo, donde una calificación puede definir el supuesto esfuerzo o talento del estudiante.

El psicólogo Laurence Steinberg de Harvard señala que la presión académica puede ser más desafiante de manejar que la interacción en redes sociales, destacando que, al hablar con jóvenes, la presión escolar se menciona más frecuentemente que la búsqueda de aprobación en las distintas plataformas.

Ante este panorama, surge la pregunta crucial: ¿cómo mostrar interés en el desarrollo de un hijo sin ejercer presión y causar más perjuicio que beneficio? Aunque parezca complicado, la clave podría residir en un cambio fundamental en la forma de comunicación entre padres e hijos, siguiendo los ejemplos mencionados por la experta en crianza de la prestigiosa universidad.

En este sentido, aunque la dieta del menor no es tan importante, desviar la tensión a otro punto puede ser clave para evitar la presión constante y que de esta forma los hijos aprendan que ellos están por encima de sus propios logros.