miércoles, 22 de enero de 2014

Conducta alimentaria


SALUD | Luis Parejo | El Mundo

La preocupación por tener el cuerpo deseado puede llegar a convertirse en una obsesión y derivar en trastornos de la conducta alimentaria. Cuando esto ocurre, los pacientes, casi siempre jóvenes y adolescentes, adquieren patrones de alimentación peligrosos para la salud. La anorexia nerviosa y la bulimia son las enfermedades de este tipo más frecuentes.
.
Ambas patologías comparten algunos síntomas como la baja autoestima y una extrema preocupación por el peso y la figura.
.
El paciente anoréxico se ve gordo aunque no lo esté ya que distorsiona su imagen corporal. Por eso, evita comer e incluso siente repugnancia por los alimentos. En la mayoría de los casos recurre a laxantes y diuréticos y realiza ejercicio intenso con objeto de perder peso, hasta llegar a poner en serio peligro su vida. Por su parte, el enfermo de bulimia come grandes cantidades de alimento y tras ello, para compensar el 'atracón', vomita o toma laxantes.

El tratamiento requiere un plan integral que incluya fármacos y terapia psicológica. El objetivo más inmediato es evitar que el paciente coma de forma excesiva y a continuación se provoque el vómito, (en el caso de bulimia); que recupere el peso ideal y también los niveles adecuados de nutrientes de su organismo. La terapia psicológica tratará de subsanar los problemas de comportamiento y alcanzar el equilibrio emocional. Ésto ayudará al paciente a recuperar la imagen real de su cuerpo y dejar atrás la distorsionada por la baja autoestima y otros problemas anímicos, así como a aprender a comer siguiendo un patrón regular y  sano.

INFORMACIÓN  DE  ASOCIACIONES:


Tots bojos

QUADERN | A la lletra

Qui mesura la importància del patiment de cada subjecte?

ALBERT GARCIA I HERNÁNDEZ | EL PAIS | 06/11/2013

El DSM, Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders, és un manual de l’associació nord-americana de psiquiatria que enumera una llista extensa dels anomenats trastorns mentals.

Ara se’n discuteix sobre la cinquena edició (maig del 2013). Cada nova edició amplia desorbitadament noms de malalties psíquiques que no són sinó símptomes o, més obscenament, noms de malalties dissenyats per la indústria farmacèutica, i hi ha un moviment mundial que qüestiona el rigor del contingut d’aquesta obra: una resposta massiva, recollida de signatures, actes i conferències, manifestos, etc. Va haver-hi un moment difícil perquè els psicòlegs nord-americans volien "negociar" alguns punts per tal de salvar aspectes del manual. La resta del món va decidir tirar endavant sense els col·legues dels Estats Units. Però, finalment, l’Institut Nacional de Salut Mental d’aquell país va anunciar que abandonava definitivament la classificació del DSM perquè la considerava mancada de validesa científica. Un cop dur per a la indústria farmacològica.

Per a fer-nos-en una idea, el DSM-5 considera trastornat mentalment qui "pateix accessos de mal humor freqüents", "qui pateix oposició desafiadora", és a dir, "certs xiquets que diuen que ‘no’ als pares un cert nombre de vegades"
.
No és gens estrany si pensem que un programa salvatge, més propi de l’època nazi, com ara Supernanny s’emet en horari infantil i familiar.

Molts psicòlegs, i pràcticament tots els psicoanalistes, observen amb preocupació com creix la medicació psíquica entre els xiquets, cada volta més i cada vegada a una edat més primerenca. Sembla que es tracta d’habituar-los des de ben menuts a devorar medicaments.
Un xaval de pocs anys, de qui cal esperar una vitalitat pròpia de l’edat, és tractat immediatament d’"hiperactiu" si es manifesta així. Si és incapaç de parar quiet, mut, catatònic davant del televisor vol dir que pateix una malaltia diagnosticada pel DSM
.
Igualment passa amb el famós "trastorn bipolar" que ara sembla estendre’s com una passa entre la població.

Qui no té moments d’eufòria seguits de melangia o simplement de tristesa per qualsevol motiu, siga important o no? I qui mesura la importància del patiment de cada subjecte?  Hi ha qui no vessa una llàgrima per la mort d’un familiar i en canvi s’afona si se li mor el gos, o perquè ha rebut la notícia de la desaparició d’una amistat.

Aquesta deu ser l’arrel de la qüestió: fabricar el medicament, inventar el nom de la malaltia i administrar-lo conjuntament, estadísticament, sense distingir les persones d’una en una. I resulta que no funciona si no és en el miratge del curt termini. La gent és tossuda, particular, respon al mateix ritme o a un ritme superior als diagnòstics amb manifestacions simptomàtiques noves. Els laboratoris no donen l’abast.


(Bonjourtristesse, seu a taula; compartim el vi, la música, un alé de lentitud. Ací, a les catacumbes de l’ésser humà, lluny de manuals i classificacions)

La respiración asistida puede producir daños neurológicos

INVESTIGACIÓN en pacientes de la UCI
 Un 30% de los ingresados en la UCI y con ventilación asistida sufren consecuencias.
·         A medio y largo plazo, este deterioro se traduce en ansiedad, depresión y delirios.

EUROPA PRESS Oviedo | El Mundo | 31/10/2013

La Universidad de Oviedo, en colaboración con el hospital St. Michael de Toronto y la Universidad de Pennsylvania, ha demostrado a través de un estudio que la ventilación mecánica a la que se somete a los pacientes ingresados en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), provoca a medio plazo daños neurológicos.
La Universidad, mediante una nota de prensa, ha explicado este jueves que los investigadores han descubierto un mecanismo molecular que explica la conexión entre la respiración asistida y los daños cerebrales. El trabajo ha sido publicado recientemente en la revista 013.
Según la Universidad, al menos un 30% de los pacientes ingresados en la UCI y que reciben ventilación asistida padecen algún daño neurocognitivo que a medio y largo plazo se traduce en síntomas como ansiedad, depresión y, especialmente, delirio.
"Los experimentos en el laboratorio de la Universidad asturiana constataron que la distensión pulmonar producida por la ventilación mecánica provoca una señal que transmite el nervio vago y un incremento de la liberación de dopamina, que causa muerte neuronal", explica la institución. Las pruebas realizadas en el laboratorio y en el Banco de Cerebros del Hospital Universitario Central de Asturias han desvelado cómo se produce el daño cerebral en los pacientes.
La descripción del mecanismo molecular permite aplicar tratamientos que eviten esos daños gracias a la dispensación de medicamentos antidopaminérgicos a los pacientes susceptibles de sufrir estas lesiones. El siguiente paso en la investigación del equipo, liderado por el doctor Guillermo Muñiz Albaiceta, supone lograr un diagnóstico precoz y determinar qué pacientes tienen mayor probabilidad de experimentar estos daños a través de estudios genéticos.
"Hemos establecido ya los modelos en ratones y ahora estamos buscando aproximaciones terapéuticas que nos permitan evitar ese mecanismo molecular que acaba por dañar el hipocampo", ha explicado el doctor Muñiz Albaiceta. Los hallazgos podrían conducir a nuevos usos terapéuticos de los fármacos que ya están en el mercado y abrir la puerta a la creación de nuevos medicamentos específicos.