Una
asociación médica estima que hacen falta al menos tres profesionales de
enfermería por cada 100.000 habitantes
La sanidad pública
española necesita al menos 1.800 profesionales para llegar a la cantidad de
psiquiatras, psicólogos clínicos y personal de enfermería dedicados a la atención de la salud mental en adultos recomendados por la Sociedad Española de Psiquiatría AEN. Los
datos los ha facilitado Félix Andrés González Lorenzo, presidente de la sección
canaria de la asociación, con motivo de un debate con periodistas organizado
por la Sociedad Española de Patología Dual celebrado en Madrid.
En concreto, la AEN estima que hacen
falta al menos tres profesionales de enfermería por cada 100.000 habitantes en
estas unidades públicas, pero que de media se está en 1,84. Eso quiere decir
que hay unas 715, y faltan unas 460. Respecto a los psicólogos clínicos, si se
toma como el mínimo requerido una tasa de 4 por 100.000 habitantes, hay
alrededor de 560 (un 2,06 por 100.000), y harían falta casi 800. Por último, respecto a los
psiquiatras con una tasa
recomendada de 6 por 100.000, hay 1.075 (3,4 por 100.000) y faltarían 540. En
la información falta la de Cataluña.
Los datos son de 2012, pero González
Lorenzo afirma que, si acaso, la situación en los últimos tiempos se ha
deteriorado, con los recortes y la imposición de una tasa de reposición (el
número de vacantes que se podían suplir en las Administraciones públicas) del
10%. "Y eso solo se ha podido compensar aumentando la carga de trabajo".
Pero, aparte del déficit general (o
medio), en el congreso se puso de manifiesto otro aspecto: hay comunidades que
doblan a otras en cuanto a dotación. "En un estado donde el IRPF es
similar para todos los ciudadanos, no todos ellos gozan, ni mucho menos, de la
misma asistencia sanitaria", afirma González Lorenzo. Por ejemplo, en lo
referente a psiquiatras (siempre hablando de las unidades de atención a adultos
de la sanidad pública), Galicia está en la cola con 2,3, mientras que en el
País Vasco se llega a 4,99, la ideal. En psicólogos, también Galicia es la peor
dotada (1,2 por 100.000 habitantes), y Castilla-La Mancha la mejor (3,22). En
enfermería, Galicia vuelve a estar a la cola (una tasa de 0,86) y País Vasco en
cabeza (3,35).
Precisamente el lunes 25 se cumplen 30
años de la reforma psiquiátrica que cerró los manicomios, y la Confederación
Salud Mental de España ha elaborado una
serie de reclamaciones por los incumplimientos que aún arrastra esta norma. Y
el primero y el tercero son, respectivamente, "romper con la desigualdad
que hay entre territorios en el nivel de desarrollo y de implantación de una
red de atención a la salud mental adecuada" e "incrementar el
número de profesionales dedicados a la
atención de la salud mental ya que el número es insuficiente".
Además, reclaman mejorar la atención en
los episodios de crisis del afectado, formar a los profesionales de atención
primaria para la detección y atención temprana de la enfermedad mental,
garantizar una coordinación socio-sanitaria para la detección, prevención y
tratamiento de la salud mental, la promoción de la vida personal e
independiente y que las personas con problemas de salud mental tengan más voz
en la toma de decisiones que les competen.
La situación oficial ante la salud
mental es complicada. En la última reunión del Consejo Interterritorial del
Sistema Nacional de Salud, del pasado 13 de abril (la reunión de coordinación
de la sanidad pública entre el ministerio y las comunidades autónomas) debería
haberse aprobado una actualización de la Estrategia de Salud Mental, según el orden del día, pero la oposición
de algunos consejeros lo impidió, con lo que el único marco para el abordaje de
estas patologías es el documento de 2013, que vencía en 2015.