JOSÉ PADILLA |
La Mente es Maravillosa | 15/09/2022
El trastorno obsesivo-compulsivo
tiene diferentes manifestaciones, pero todas ellas derivan en actos que acaban
por limitar la vida de la persona. En esta ocasión hablaremos de la
aritmomanía, un tipo de TOC relacionado con los números. ¡Sigue leyendo!
El trastorno obsesivo-compulsivo
(TOC) es a menudo una condición incapacitante que consiste en pensamientos,
impulsos o imágenes recurrentes, molestas e intrusivas que provocan una
sensación de incomodidad. Para reducir la ansiedad y la angustia asociadas
con estos pensamientos, el paciente puede emplear compulsiones o rituales. El
DSM-5 define las compulsiones por los siguientes puntos:
·
Comportamientos repetitivos o
actos mentales que la persona se siente impulsada a realizar en respuesta a
una obsesión.
·
Las conductas o actos mentales
tienen como objetivo reducir la ansiedad o prevenir alguna situación temida. No
obstante, estos comportamientos o acciones mentales no conectan de manera
realista con lo que quieren prevenir.
La causa del TOC aún se
desconoce, pero es probable que sea multifactorial. Se cree que existe
una predisposición genética, ya que
del 45 % al 65 % de sus variaciones son atribuibles a factores genéticos. De
hecho, la investigación ha
demostrado que la heredabilidad de este trastorno es tan alta que va del 45 % a
65 % en niños y del 27 % a 45 % en adultos.
También se ha
observado que la incapacidad para hacer frente a la
incertidumbre, un mayor sentido de la responsabilidad y el pensamiento mágico
parecen predisponer a los hábitos obsesivo-compulsivos.
Ahora que ya tenemos un panorama
global del TOC, adentrémonos en una de sus más interesantes variaciones: la
aritmomanía.
¿Qué es
la aritmomanía?
Es un
tipo de TOC caracterizado por la compulsión de contar objetos o acciones y
hacer cálculos matemáticos. La persona puede verse
desbordada por un irresistible impulso de llevar cuentas de las cosas que tiene
a su alrededor. Quienes padecen aritmomanía no pueden evitar contar números,
objetos, palabras o, incluso, dejar de repetir acciones cierto número de veces.
Este TOC opera como cualquier
otro, un pensamiento incómodo (obsesión) invade a la persona, la angustia se
dispara y las acciones o rituales emergen (compulsiones) como mecanismo para
neutralizarla.
Apelar a los rituales compulsivos
es la principal estrategia que la persona obsesiva usa para afrontar su
angustia. Sin embargo, aunque puede que esto le ayude
en el momento, a la larga es muy perjudicial y produce más angustia que
no hacer la compulsión.
Las
manifestaciones más comunes de la aritmomanía
·
Contar palabras. La
persona puede contar las palabras en una conversación, en un texto…
·
Contar objetos. Hay
quienes cuentan los escalones que van subiendo, las matrículas de los coches,
la cantidad de cosas en una sala, etc.
·
Realizar cálculos matemáticos. El individuo
está constantemente haciendo cálculos aritméticos: sumas, restas,
multiplicaciones, entre otros.
·
Contar hasta un número antes de hacer algo. Antes
de salir de casa, la persona tiene que contar hasta 50, por ejemplo.
·
Repetir algo un número de veces. El
sujeto puede mirarse al espejo 3 veces, dar 5 vueltas al café antes de tomarlo,
enjabonarte las manos 3 veces…
·
Evitar un determinado número. La
persona evita un número (esto no tiene nada que ver con la superstición). Por
ejemplo, tiene que lavarse 3 veces las manos porque hacerlo una vez le
generaría demasiada ansiedad.
Otros ejemplos de la aritmomanía
son los siguientes:
· Contar los elementos de un cuadro.