Amit Sood, M.D. | Mayo Clinic | 12/03/2020
No es sorprendente que la multitarea no funcione para ti. En realidad, la multitarea
es un mito. En el mejor de los casos, las investigaciones muestran que tu mente
solo puede cambiar rápidamente entre tareas. En lugar de tratar de hacer dos
cosas a la vez, busca maneras de mantener la concentración en la tarea que
estás realizando. A muchas personas les resulta difícil concentrarse, pero es
una habilidad que puedes desarrollar. Para mejorar tu concentración:
Reduce las distracciones. Apaga la televisión, deja el teléfono y
cierra la sesión de tu cuenta de correo electrónico. ¿No estás convencido de
que esto te ayude? Elimina el tiempo de pantalla que no sea esencial durante
dos días y comprueba cuánto más puedes hacer.
Planifica períodos de
actividad y tiempos de descanso. ¿Eres
una persona madrugadora? Entonces, no desperdicies ese tiempo en el correo
electrónico. En su lugar, úsalo para abordar proyectos que requieran tu plena
concentración. Reserva la tarde para revisar tu bandeja de entrada o ponerte al
día con el manejo de archivos.
Sácalo de tu cabeza. Demasiadas notas mentales hacen que tu mente
se vuelva desordenada. Todos esos asuntos pendientes pueden desgastar tu
energía mental. Escribe lo que tengas en tu mente en un papel o regístralo
digitalmente. Piensa en ello como un almacenamiento externo.
Entrena tu cerebro. Cualquier habilidad que valga la pena
requiere práctica. Aprender a concentrarse no es diferente. Invierte tiempo en
dominar el entrenamiento de la atención, la conciencia plena u otros tipos de
meditación. Estas son excelentes maneras de practicar para controlar las
distracciones y mejorar el enfoque.
Al mejorar tu concentración, no solo lograrás hacer más, sino que también
disfrutarás de una mayor fluidez, cuando estás tan absorto en una actividad que
nada más parece importar. La fluidez puede crear una sensación de plenitud,
compromiso e incluso satisfacción.