El doctor Javier Cabanyes explica el por
qué del aumento de los trastornos de personalidad, además de los problemas de
ansiedad y depresión actuales
Redacción Vivirmejor.com.- La época de
crisis en la que estamos viviendo ha agudizado la aparición de trastornos de
personalidad. El doctor Javier Cabanyes, neurólogo de la Clínica Universidad de
Navarra y autor del libro “La salud mental en el día de hoy” de la editorial
EUNSA, comenta el por qué del aumento de estos casos y los problemas de
ansiedad y depresión que a tantas personas afectan.
Una sociedad enferma
El doctor Cabanyes afirma que la nuestra
es una sociedad enferma. Su dinámica se ha desestabilizado con la serie de
problemas que la acucian, y eso está influyendo mucho en el hecho de que muchas
personas pierdan la razón de su día a día. Por eso cada vez se dan más casos de
personas que entran en este bucle de negatividad y acaban viéndose apoderados
por el vértigo.
¿Nos ocurre a todos?
No todas las personas reaccionan igual
ante una misma situación. Hay individuos que tienden a ver el vaso medio lleno
mientras que otros lo ven medio vacío. Esto es así porque nuestra concepción de
la realidad viene marcada por unos factores educativos, de experiencias, de
nuestro entorno, pero también de la estructura de funcionamiento del sistema
nervioso. Además, no es lo mismo estar solo ante una adversidad que afrontarlo
con una coyuntura que nos apoye. Evidentemente, la perspectiva es diferente.
Situaciones negativas y niños
Los niños viven la crisis económica desde
un punto de vista infantil, lo que no quiere decir que no perciban el clima de
preocupación, precariedad o falta de recursos que muchas familias están
viviendo. El doctor Cabanyes incide en la importancia de los mensajes que se
manden desde el entorno familiar, que es lo que ayuda a encontrar explicación a
un entorno difícil de entender. La familia debe ser capaz de transmitir
mensajes positivos aunque la situación sea preocupante. Por eso hay que
hacerles entender que la vida también tiene situaciones difíciles y que hay que
saber adaptarse a ellas. Además, hay que enseñarles a cultivar la amistad, las
actitudes solidarias y apoyarse unos a otros.