MARIANA ALVES GUERRA | psicologíapositiva.com.uy | 06/05/2025
Es un trastorno del estado de
ánimo que afecta profundamente cómo piensas, sientes y actúas. Puede
aparecer sin una causa aparente (aunque en realidad es multifactorial), o
despertar a partir de una pérdida, crisis o estrés prolongado. No discrimina
edad, incluso podemos encontrar niños y adolescentes con depresión.
Quien la vive puede sentir una tristeza
persistente, vacío emocional, pérdida de interés por las cosas que antes
disfrutaba, fatiga constante, alteraciones del sueño y del apetito, dificultad
para concentrarse y, en casos severos, pensamientos de inutilidad o suicidio.
Es importante comprender que la voluntad
está rota, e incluso las tareas más sencillas pueden sentirse como
titánicas. Su diagnóstico llega gracias a la intervención de
un profesional de la salud mental. Se debe pedir ayuda inmediatamente cuando
sientes que la tristeza se mantiene, si te cuesta realizar tus tareas diarias
como bañarte, salir de tu casa, tender tu cama, o si has tenido pensamientos de
lastimarte.
Existen distintos tipos de
depresión, aquí algunos ejemplos:
Depresión mayor (trastorno depresivo
mayor)
Es el tipo más conocido. Se caracteriza por episodios intensos de tristeza,
pérdida de interés, cambios en el apetito y el sueño, fatiga, pensamientos
negativos, e incluso ideación suicida. Los síntomas duran al menos dos semanas
y afectan significativamente la vida diaria.
Trastorno depresivo persistente (distimia)
Es una forma crónica de depresión. Los síntomas son menos intensos que en la
depresión mayor, pero duran más (mínimo dos años). Las personas con distimia
pueden seguir con su rutina, pero con un constante sentimiento de
insatisfacción o vacío.
Trastorno afectivo estacional (también
conocido como depresión de invierno)
Relacionado con los cambios estacionales, suele aparecer especialmente en
invierno cuando hay menos luz solar. Provoca síntomas similares a la depresión
mayor, incluyendo tristeza, fatiga y aislamiento.
Depresión postparto Afecta a
algunas mujeres después del parto. Incluye tristeza profunda, agotamiento
extremo, ansiedad y dificultad para vincularse con el bebé.
Depresión psicótica
Es una forma grave de depresión mayor acompañada de síntomas psicóticos como
alucinaciones (ver u oír cosas que no existen) o delirios (creencias falsas),
generalmente con un contenido negativo o de culpa.
Trastorno disfórico premenstrual
Forma severa del síndrome premenstrual que ocurre en mujeres. Incluye
irritabilidad, tristeza extrema, ansiedad y cambios en el sueño o apetito, poco
antes de la menstruación.
La pregunta importante, ¿tiene cura? Sí,
en la mayoría de los casos. Aunque algunas depresiones no
remiten por completo, eso no significa que no se pueda vivir bien. Con
tratamiento, apoyo constante, y la gestión adecuada de pensamientos y
emociones, muchas personas aprenden a convivir con la depresión y llevar una
vida más plena y satisfactoria.
El tratamiento es fundamental, ya que la
depresión no desaparece sola, hay que tomar cartas en el asunto para poder
disfrutar de la vida como te mereces.