ALDEAVIRAL – 20/04/2016
Además de provocar adicciones, fumar
marihuana puede desarrollar la aparición repentina de enfermedades
psiquiátricas como depresión, ansiedad y esquizofrenia, advirtió Alfonso
Zavaleta, experto de Cedro.
“La marihuana funciona como una
llave, y si alguien tiene el gen dormido de una enfermedad psiquiátrica, esa
droga lo puede activar”, señaló el consultor del Centro de
Información y Educación para la Prevención del Abuso de Drogas (Cedro).
Esta hoja es la droga ilegal más
consumida del mundo. En países como Holanda se aprobó su consumo con fines
recreacionales. Sin embargo, a la luz de los resultados, las autoridades de ese
país están mirando el tema con otra perspectiva, más aún cuando durante el
2013, se registró la tasa más alta de solicitud de atención médica por
dependencia a la marihuana a nivel de la Unión Europea.
No debe usarse como medicina
Asimismo, Zavaleta refirió que en ningún
país del mundo se recomienda la marihuana fumada como medicina. “Solo algunos
países la han legalizado para uso recreacional mas no terapéutico”, afirmó.
Explicó que la hoja de marihuana tiene
en su interior un total de 66 cannabinoides, que son moléculas de alcoholes, de
los cuales el conocido como Delta 9 o THC es el causante de las alteraciones
que sufre quien la consume.
Zavaleta señaló que en caso de Chile, lo
que se ha autorizado es el uso del principio activo THC para aliviar los
terribles dolores que sufren los pacientes con cáncer terminal.
“Ese tipo de tratamiento no es el
primero a aplicar ni tampoco el mejor, pues antes de eso se debe administrar
otra línea de productos y llegar al THC solo cuando las demás medicinas no le hacen
ningún efecto al paciente para atenuar el dolor”, comentó.
Con esa finalidad, dijo, en Chile se ha
dispuesto destinar un área para plantación legal de marihuana. A partir de esas
hojas, se hacen extracciones de ese principio activo y se otorga tratamiento
humanitario a ese tipo de pacientes.
Advirtió que el riesgo es que el
paciente desarrolle una adicción a esa sustancia, tan igual como si se fumara y
por eso es considerado el último recursos médico, sobre todo en el tratamiento
a pacientes con dolor crónico, a quienes sufren vómitos por el tratamiento con
quimioterapia por cáncer y a los enfermos de Sida que sufren a su vez anorexia
y no se alimentan, por lo que requieren estimular el apetito.