NAHUM MONTAGUD RUBIO | Psicología y Mente
¿Cómo
persuadir a alguien para que vaya a psicoterapia? Veamos pautas para hacerlo
sin presionar.
Somos seres empáticos. Ello hace que
nos preocupemos no únicamente por nosotros mismos, sino también del bienestar
de nuestros familiares y amigos, los cuales pueden estar pasando por una mala
situación.
A veces se hace necesario recurrir a un
psicólogo, quien puede contribuir a mejorar el estado de nuestro ser querido.
Sin embargo, acudir a terapia no es una decisión que se suela tomar con
facilidad y puede darse el caso de que
quien necesita ayuda profesional no la llegue a pedir por
diferentes motivos. El hecho de que alguien cercano tenga un problema no
únicamente le afecta a él, sino también a su círculo cercano, y son sus
allegados quienes consideran oportuno que se haga una visita a un profesional.
La pregunta que muchas personas se hacen al encontrarse en esta situación
es: ¿cómo convencer a alguien de ir
al psicólogo? El proponérselo puede llegar a ser un tema
muy delicado, y generar una situación de tensión al sentirse ofendido y que se
le puede estar llamando “loco”. Veamos varios consejos e ideas clave para saber
cómo abordar esta clase de problemas.
¿Qué resistencias pueden surgir al proponer ir a psicoterapia?
Aunque en las últimas décadas la
profesión del psicólogo ha ido adquiriendo mayor popularidad, además de
divulgarse mejor qué es lo que se realiza en la consulta psicológica, lo cierto
es que muchas personas se
muestran reticentes a acudir a terapia psicológica.
Si bien la imagen del psicólogo como
aquella persona que se encarga únicamente de las personas con trastornos psicológicos
graves, como la esquizofrenia o el trastorno bipolar, se ha ido superando, son
muchos los que siguen creyendo que ir al psicólogo es cosa de “locos”.
También puede darse el caso de que la persona que está sufriendo considere
que se encuentra en una situación tan grave que ya no tiene situación,
o que tema que al ir al psicólogo le confirme que no hay nada que hacer, y
decida no enfrentarse a ello.
Hay quienes ven el pedir ayuda como una
muestra de debilidad, y temen acabar dependiendo de un profesional de la salud
mental. También, debido a un desconocimiento de lo que realmente hacen los
psicólogos, creen que los acabarán medicando y sabrán realmente abordar de
manera profunda su situación.
Si bien hay personas que son
conscientes de que están sufriendo y necesitan ayuda, el temor a un elevado
costo económico de la psicoterapia puede impedir que vayan al psicólogo.
Es importante indicar que, salvo en
situaciones donde haya un trastorno psicológico muy grave, debe ser la propia persona quien acuda al
psicólogo de forma libre, sin que sus familiares, amigos o
pareja hayan organizado un engaño o la lleven a la consulta de forma forzada.
Para un psicólogo clínico, este tipo de situaciones son especialmente
difíciles, dado que la persona a la que se debe intervenir no desea recibir
ayuda profesional.
Consejos para convencer a alguien de ir al psicólogo
Como amigos, familiares o
pareja de alguien que está sufriendo, se puede seguir una serie de
recomendaciones que pueden
ayudarnos a que la persona sea consciente de que necesita ayuda y de que puede
mejorar, además de mostrarle que estamos de su lado, que la apoyamos y queremos
lo mejor para ella.
A continuación se presentan algunos consejos cuya finalidad es ayudar a
saber cómo convencer a alguien de ir al psicólogo.
1. Elige el mejor momento
y lugar
Proponer ir al psicólogo es un tema
delicado. Es por ello que lo recomendable es elegir un momento y un lugar en los que predomine la
calma y la intimidad, en los que no haya tensión y no hayan
otras personas que puedan reaccionar negativamente a la propuesta de acudir al
profesional e influir en quien necesita ayuda.
2. Escúchale y sé
empático/a
Queremos ayudarle, y por ello hemos de
mostrar que esa es nuestra intención. Pregunta sobre sus sentimientos, cómo está viviendo la situación y
cómo percibe que puede evolucionar. Si alguna vez te ha
ocurrido algo similar, cuéntaselo y hazle entender que todo puede mejorar con
la ayuda adecuada.
3. Proponle una primera
visita
Recomendar empezar inmediatamente con
la psicoterapia puede verse como proponer algo complicado y económicamente no
asequible. En vez de ello, puedes recomendar que pruebe una toma de contacto
con un psicólogo, y ver qué sucede y cómo se siente después de la sesión.
4. Acompáñale en la
primera sesión
Ir al psicólogo por primera vez se
puede percibir como una tarea intimidante. Para garantizar que la persona vaya, pero sin
presionarla, es una muy buena idea acompañarla durante la
primera sesión, que sienta que inicia el proceso con el apoyo de alguien
cercano.
5. No presupongas el por
qué de su sufrimiento
Aunque todos los seres humanos tenemos
mucho en común, cada uno puede atribuir y vivir el sufrimiento de formas
distintas. No interpretes el por qué de su sufrimiento, simplemente comenta tu
percepción dejando claro que cada uno es libre de poder vivir una misma
experiencia de forma variada.
6. Ofrécele información
veraz y de origen profesional
Muchos son los mitos que existen en
torno a la figura del psicólogo. La mejor manera de luchar contra ellos es
ofrecer artículos, libros, webs y otros recursos elaborados por los propios
profesionales para ayudar
a tener una visión real del profesional de la psicología y su labor.
7. No es lo mismo un
psicólogo y un psiquiatra
Muchas personas creen que ir al
psicólogo implica ser medicado, pese a que este profesional no es quien receta psicofármacos, y le
tienen miedo a esa posibilidad. Recetar fármacos es tarea del psiquiatra, y
solo medica en caso de que sea necesario. Por eso, hay que informar sobre este
aspecto en caso de que resulte un obstáculo a la hora de convencer a alguien de
que vaya al psicólogo.
8. Facilita el proceso de
búsqueda de un psicólogo
Gracias a las nuevas tecnologías son
muchos los psicólogos que disponen de páginas web en las que se pueden
concertar citas, además de explicar su ámbito de intervención y en qué se han
especializado. Así pues, resulta muy fácil ayudar a encontrar a un profesional de la psicoterapia
que se adapte a las necesidades de la persona a la que quieres convencer."
9. Si es posible y
necesario, subvenciona el tratamiento
La psicoterapia puede verse como un
proceso caro. Si te lo puedes permitir, ofrécete a pagar la primera sesión. Eso
demostrará que estás muy implicado en el proceso terapéutico y le motivará a
acudir a terapia. Una
vez haya empezado, será más fácil que pierda sus miedos y posibles prejuicios.
10. Hazle consciente de
que es él/ella quien decide
Todas las personas tienen derecho a ser
partícipes en la mejora de su salud mental. Aunque le propongamos ir al
psicólogo, también debemos hacerle consciente de que él/ella es libre de decidir si acudir o no a consulta,
y que es responsable de su bienestar psicológico.
En caso de que, a pesar de haber
seguido estos consejos, la persona no quiera acudir al psicólogo, se debe
insistir, pero manteniendo
la calma y tratando de argumentar los beneficios de recibir terapia.