viernes, 28 de enero de 2022

Cinco formas de volver a incorporar lo lúdico a tu vida


STACY M. PETERSON     |     Mayo Clinic     |     29/07/2021

La creatividad, la diversión y los amigos pueden contribuir a la felicidad y la resiliencia durante toda la vida. Aprende a conectar con tu lado lúdico a cualquier edad.
¿Piensas que jugar es solo para niños? Piénsalo dos veces. De hecho, puede tener importantes beneficios para los adultos. Mantener un sentido de creatividad y diversión se relaciona con una mayor felicidad durante toda la vida. Además, se cree que contribuye a la resiliencia y al envejecimiento saludable.
Una posible razón: adoptar un enfoque lúdico puede equiparlo para enfrentar mejor el inevitable estrés de la vida. En un estudio de estudiantes universitarios, se descubrió que aquellos que se calificaban a sí mismos como más propensos a jugar podían afrontar mejor los desafíos en sus vidas.
Es normal experimentar estrés, pero la forma en que percibes ese estrés y lo que haces al respecto puede tener una gran repercusión. En el estudio mencionado, cuanto más propensa a jugar era una persona, más probable era que buscara un lado positivo cuando las cosas no salían según lo planificado, una estrategia denominada reformulación positiva. ¿Llueve cuando estás de vacaciones? Podría ser una oportunidad perfecta para beber té y jugar juegos de mesa.
Existen distintas maneras de ser alegre y divertirse. Muchas personas disfrutan de hablar y relajarse con amigos. Otras disfrutan de la actividad física, como el yoga o la gimnasia acuática. Los investigadores que estudian los beneficios del juego señalan que tiene más que ver con tu actitud que con lo que estás haciendo en realidad: cosas como vivir el momento, encontrar regocijo en los detalles cotidianos o encontrar diversión en la resolución de problemas, como acertijos y crucigramas, son todas maneras de jugar.
Y mientras que algunas personas tienen una inclinación natural hacia la diversión a través del juego, esta habilidad también puede practicarse y aprenderse, de la misma manera en que, con el tiempo, una persona puede aprender a ser más agradecida.
¿Estás listo para jugar y divertirte? He aquí algunas maneras de comenzar:
·        Programa tiempo para un pasatiempo. ¿Siempre quisiste aprender carpintería? ¿Te encanta la jardinería? Encuentra tiempo para hacer las cosas que disfrutas. Pero ponte como meta divertirte en el proceso y no te enfoques únicamente en el producto final.
·        Obtén apoyo social. Hacer cosas divertidas con otras personas es un aspecto clave de la diversión. Tal vez te gustaría unirte a una liga de fútbol para adultos. O tal vez prefieras un club de avistamiento de aves. O quizás simplemente quieras encontrarte con un amigo cercano para tomar un café y hablar acerca de la vida.
·        Juega. Según un estudio, las personas caminaban en promedio 2.000 pasos más al día cuando comenzaban a jugar con una aplicación móvil que utilizaba el GPS del dispositivo y recompensaba a los jugadores por encontrar objetos en distintos lugares. También puedes crear juegos en tu vida no digital. Sube por la escalera común y trata de llegar antes que las personas que usan la escalera mecánica. O juega al Veo, veo mientras haces un viaje en auto.
·        Visita un parque o una plaza. Estar al aire libre puede mejorar el estado de ánimo y ser una actividad social divertida. Y no existe eso de ser demasiado viejo para jugar al aire libre.
·        Disfruta del momento presente. Las personas que juegan suelen ser aquellas que se toman el tiempo para apreciar la belleza que hay en el mundo. Practica la atención plena y trata de atrapar un copo de nieve con la lengua, observa las hojas que cambian de color y cómo se ven, siente o huele este otoño, o permítete saltar en un charco durante la próxima lluvia (las botas de lluvia son opcionales).
 
En palabras simples, jugar es encontrar regocijo, humor, alegría e incluso diversión en la vida cotidiana. Y todos pueden hacerlo si se fijan la meta de involucrarse más en la diversión y las actividades placenteras.