PSICOLOGÍA POSITIVA
Mariana Alves | 12 / 06/
2017
Como hemos
mencionado con anterioridad, los logros son uno de los pilares del bienestar,
analicemos nuevas estrategias para alcanzarlos.
Lograr algo significa obtenerlo y lo que deseemos obtener, en el amplio
sentido de la palabra, depende 100% de nosotros. Tienes que estar alineado con
tus propios deseos y no intentar satisfacer lo que otros te dicen que es
correcto para ti.
La atención que le prestas a lo que quieres lograr es
fundamental. Las metas tienen que ser pensadas, elaboradas y con un plan de
acción para poder ser llevadas a cabo. Va a requerir ciertos sacrificios de tu
parte, tal vez dejar de hacer algunas cosas divertidas, o incluso ser más
prolijo en los horarios sueño.
La atención es un recurso limitado, esta habilidad para concientemente
direccionar tu energía es escasa, por eso tienes que ser cuidadoso y darte
cuenta hacia dónde estás dirigiendo tu foco. Siendo honesto, ¿cuánta atención
realmente estás dedicándole a esa meta?
Si no eres cuidadoso con tu concentración, te atacarán la desmotivación,
sentimientos de baja autoestima y te sentirás frustrado y fracasado. Sin
embargo, si realmente te concentras, el premio será la pasión, el entusiasmo,
tu energía y un sentimiento de propósito.
¿Estás dispuesto a pagar el precio para
obtener lo que deseas? Porque algunas metas requieren de
mucho tiempo, paciencia y dedicación. Si no estás completamente comprometido,
te aburrirás y las abandonarás a medio camino.
Aprende a dirigir tu atención
Cambiar tu vida requiere un compromiso serio de tu parte, ya sea que
quieras mejorar a nivel profesional, laboral, físico o emocional. Donde pones
tu foco, es ahí donde puedes trabajar con seriedad.
Hoy en día es extremadamente sencillo perder la atención, constantemente
estás siendo seducido por el entretenimiento, internet, el celular, reclamos
laborales o personales. Incluso puedes sabotearte anteponiendo otras cosas
menos importantes para no comenzar a trabajar en lo que realmente quieres. Para
que una transformación real ocurra en tu vida, es necesario cuidar aquellas
áreas que están pidiendo a gritos un proceso de mejoría.
Aprende a decir que no, si realmente no deseas salir, si no estás encontrando
el tiempo para trabajar activamente en tu meta, es necesario que comiences a
quitarle tiempo a cosas superfluas para acercarte a lo profundidad de tu deseo.
Tus metas tienen que nutrirse de tu amor, de tu pasión, si las ignoras
comienzan a morir lentamente y el sinsabor del fracaso comienza a aparecer, te
convences de que no eres lo suficientemente bueno, de que nunca llegas a nada,
sin darte cuenta que fuiste tú el que creaste esa trampa simplemente ignorando
aquello que de verdad querías.
Dale a tus metas el lugar que se merecen
Muchas personas que quieren mejorar en un aspecto de su vida tienen otros
intereses y obligaciones a los cuales prestar atención también, por ejemplo,
trabajos, hijos, parejas, amigos, familiares, hobbies, etc. Sin embargo, quien
es un verdadero triunfador con respecto a sus logros, no deja que esto se
interponga en su camino, no lo utiliza de excusa. Por supuesto que nuestro
contexto influye y que resulta más sencillo concentrarte en crecer cuando
tienes menos personas o cosas distrayéndote, pero eso no quiere decir que no
puedas alcanzar nuevos logros. Tal vez te lleve más tiempo, tendrás que ser más
paciente y bajar tus exigencias, pero no significa que no puedas trabajar en lo
que quieres alcanzar. Todo lo que poseemos ya en nuestra vida son motivadores
para seguir creciendo, ya sea porque queremos darle a nuestro hijo un padre
feliz, o porque deseas con toda tu alma salir corriendo de ese trabajo terrible
Alcanzar logros resulta más sencillo cuando encuentras metas que son coherentes
con la totalidad de tu ser, que te ayudan a crecer en todo sentido, que te
desarrollan como persona, que te ayudan a crear valor en las cosas que haces.
Resumiendo, para poder alcanzar un logro e incrementar tu sentido de
autoeficacia, esa meta requiere de atención total, un plan de acción delineado,
tiempo para reflexionar y pensar en cómo quieres lograr lo deseado.
Si tus metas son fantasías, sueños, solamente una ilusión, o no respetas la
importancia que la misma tendría para impactar positivamente en ti, entonces es
ahí cuando jamás alcanzas nada. Sé serio con lo que amas, dedica tiempo a tus
logros, sin importar que tan pequeños o humildes sean. Cuando te ves a ti mismo
capaz de alcanzar objetivos comienzas a recuperar la fe en ti y es el primer
paso para seguir construyendo tu camino hacia una felicidad realista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario