sábado, 24 de mayo de 2014

Cero stress


Mariana Alvez – Psicología Positiva | 04/09/2010

El stress se muestra como el gran enemigo de nuestra rutina, nos cansa, nos agobia, nos quita productividad y peor aún, incluso puede tener graves consecuencias para nuestra salud.  Sin embargo, no nos olvidemos que poseemos una capacidad asombrosa para adaptarnos, para buscarle  el sentido a las experiencias negativas, para aprender a crecer gracias a las adversidades. Esta cualidad innata en nosotros está más desarrollada en algunos sujetos, pero tú puedes escoger ser uno de los privilegiados.

Desde la Psicología Positiva podemos lidiar con el stress haciendo uso de herramientas sencillas que ya tenemos pero que solemos olvidar de que existen en nosotros o sencillamente no le brindamos la importancia que tienen.

El humor se nos presenta como un aliado para vivir una vida más tranquila y placentera, busquemos cultivarlo ya sea en salidas con amigos o dedicándonos al menos una vez por semana a mirar una buena película cómica. ¿Sabían que al reír se mueve el diafragma y el abdomen se contrae? Esto produce un efecto muy relajante en nuestros músculos del cuerpo así como los del rostro. La risa también es la responsable de bajar los niveles de cortisol, hormona vinculada con el estrés fisiológico producido por enfermedades o cirugías.

El optimismo puede ser utilizado también para disminuir nuestros niveles de stress, ya que nos permite ver la vida de una manera más despreocupada y nos conduce a confiar en nosotros y en nuestras capacidades. Es confiar en que si nos esforzamos y le impregnamos valor a las cosas que hacemos el futuro será como lo planeamos. El optimismo nos permite enfrentarnos a las adversidades con perseverancia y nos ayuda a entender que dentro de todo lo malo siempre hay un aprendizaje. Debemos enfocarnos en encontrar soluciones, no regodearnos en la miseria de nuestros problemas.

Cultiva el buen humor, aprecia el momento presente y disfruta cada detalle del mismo, no te sobre exijas ni tampoco caigas en la apatía, intenta vivir una vida equilibrada, no le des a las situaciones más importancia de la que tienen, intenta agregar en tu rutina actividades que te generen placer. Cambia tu perspectiva si la que tienes ahora no te está dando resultados, a veces todo se reduce a una simple elección y si sientes que no puedes solo, sabes que siempre puedes contar con la ayuda de un profesional. El primer paso radica en utilizar lo que ya posees y sacar provecho de tus propias fortalezas. Vive la vida…ama la vida…cero stress.


1 comentario:

  1. Me parece muy difícil en nuestros días llegar al "Cero stress", porque por más que nos entrenemos en las fortalezas, es muy difícil tener optimismo y sobretodo humor, cuando no tienes buena salud mental y estás en una crisis.

    Además el entorno social, amistades, familia y trabajo si se tiene, no favorecen para conseguir estos objetivos, al contrario, por lo menos en mi caso, muchas veces tengo que evadirme mentalmente para que no me conviertan el día más aciago.

    Entiendo que la psicología positiva ha de tratarlo así, pero yo me conformaría con "Cuatro stress" que es casi la mitad del que tenemos, y a partir de aquí marcar pautas pequeñas para ir avanzando y pasar del cuatro al tres, dos, uno y finalmente cero.

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