JAVIER MARTÍN-ARROYO|ANA ALFAGEME | El
País |
Sevilla-Madrid | 13-04-2020
Consultas
por Skype
UNA VULNERABILIDAD QUE SE SUMA A OTRAS MUCHAS
Las
personas con problemas de salud mental soportan con entereza el confinamiento e
incluso experimentan progresos.
“Es un reto mantenernos
como grupo, ¡pero tenemos que adaptarnos!”. El grito contenido sale de la
videoconferencia que mantienen estos días una quincena de personas con
problemas de salud mental junto a los psicólogos Ignacio Puerta y Dina Fariñas
para mitigar el confinamiento. Las montañas de pensamientos de los miembros de
esta asociación, Madrid norte Afaem5, se reordenan y aligeran su peso al
compartirse ahora en pantalla, antaño en sesiones, excursiones y reuniones de
apoyo mutuo. Para sorpresa de la mayoría, lidian con la reclusión con entereza,
a veces incluso han experimentado cierta mejoría.
“No es tan infrecuente”,
dice el psicólogo Fernando Egea. “Ocurre en las guerras. El instinto de
supervivencia enmascara los problemas psicológicos”. “Es como si las
neurosis no nos las pudiéramos permitir en estas
circunstancias”, asegura el psiquiatra Enrique García
Bernardo. Este hecho también lo recoge la guía para psiquiatras que ha
elaborado para esta crisis el Centro para el Estudio del Estrés Traumático de
Estados Unidos: “La mayoría de las personas con enfermedades mentales
preexistentes se manejarán bien, incluso algunos pueden mejorar ante los
desafíos y necesidades de los otros”, dice textualmente.
“Las emociones cambian
por minutos. Estamos acostumbrados a un control y tranquilidad para sobrevivir
a los conflictos, convivir en situación extrema nos hace vivirlo de otra
manera. Aunque haya miedo, el entorno está bastante más preparado de lo que
pensábamos”, indica Pedro Reina en la videoconferencia. La conversación fluye
por encima de los ecos y el sonido enlatado, y el coronavirus deja espacio
suficiente para que cada uno hable de sus anhelos y comparta bromas. La
casuística es variadísima, como en botica.
Cristina (nombre
ficticio), con trastorno límite de la personalidad, atraviesa picos y valles en
su rutina anímica diaria: “La convivencia en casa no está siendo idílica. Ahora
me siento agobiada, pero al menos estoy con mis cosas. Estoy más encerrada,
pero es donde mejor me siento porque tengo fobia a la calle. Y te frenas para
ir al hospital, no sabes cómo va a salir la cosa, si será incluso peor”. El real decreto del estado de alarma no
incluyó en un principio el permiso para
que pasearan por las calles las personas con problemas mentales, pero
posteriormente se corrigió.
Juan José Sánchez, padre
de dos hijas con esquizofrenia, ofrece la cara positiva: “A una de ellas le ha
subido la autoestima porque ahora va ella a comprar, toma la iniciativa y viene
contenta. Esto nos ha roto la rutina”. Sobre la dureza de la reclusión en pisos
a menudo estrechos, Puerta detalla: “Para ellos, la dificultad principal en los
hogares es encontrar espacios donde encontrar su propia identidad”.
El número de personas que
lidian con alguna enfermedad mental durante el confinamiento no es menor. En
España, una de cada 10 personas sufre algún problema de salud mental y una de
cada cuatro lo tendrá en algún momento de su vida. Es decir, en torno a 11
millones de personas, diagnosticadas o sin diagnosticar, según la Organización
Mundial de la Salud (OMS). Esta institución apunta a que los problemas de salud
mental serán la principal causa de discapacidad en el mundo en 2030.
Nel González, presidente
de la confederación Salud Mental España, que reúne a 300 asociaciones con
47.000 miembros, matiza: “A veces las convivencias en casa no son un jardín de
rosas, tanto tiempo sin válvula de escape... El 85% de la gente vive con su
familia y las reacciones son muy diversas, desde el miedo hasta la necesidad de
salir, pasando por la inestabilidad ante el futuro incierto”.
En la guía estadounidense
anteriormente citada se advierte de que habrá pacientes que sufrirán estrés
emocional y aconseja a los sanitarios que en estos casos tengan en cuenta sus
preocupaciones e incertidumbres ante la pandemia. Deben “compartirles
conocimientos médicos precisos e identificar las medidas que pueden tomar ellos
para reducir el malestar y mantener conductas saludables, particularmente el
sueño”, señala el documento.
Juan Carlos Maestro,
psicólogo clínico del hospital Virgen de las Nieves de Granada, ha visitado una
veintena de pacientes en casas hogar: “El 90% lo está llevando igual de bien
que nosotros, para sorpresa nuestra”. Fuera de las casas, las unidades de
pacientes agudos de los hospitales han sufrido un bajón y tienen camas vacías,
confirman sanitarios de Sevilla, Granada, Girona y Santiago de Compostela.
Avelino Martínez, enfermero supervisor de la unidad de enfermos agudos del
Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela, confirma: “Los
pacientes están respetando la situación muy bien, ya veremos con el paso del
tiempo, pero de momento no tenemos ingresos vinculados al confinamiento”.
Consultas
por Skype
El psiquiatra García
Bernardo, como gran parte de los profesionales de salud mental, ha proseguido
sus consultas a través de Skype o Facetime: “Que te vean es algo muy
tranquilizador”, asegura. Sus pacientes, tras días de confinamiento, “están
razonablemente bien”. “No he visto los cuadros que se daban en la epidemia del
sida, con muchas conductas paranoicas”, asegura. También el psicólogo Fernando
Egea y sus colegas del centro Psyche han cambiado la relación cara a cara por
la pantalla. “Lo importante es hacer seguimiento, en eso la tecnología nos está
ayudando muchísimo”, dice.
Esa parece ser la clave.
La Sociedad Española de Psiquiatría ha distribuido una extensa guía para que se
pueda seguir atendiendo pacientes a través del teléfono o videollamadas. A
Celso Arango, jefe de servicio de Psiquiatría del Hospital Gregorio Marañón y
presidente de la citada sociedad científica, le preocupan sus pacientes no
tanto por el efecto que pueda tener sobre ellos el confinamiento, sino porque
no puedan recibir terapias intensivas que lo precisan. “Ahora lo hacemos
telefónicamente”, puntualiza. Y los que forman parte de ensayos clínicos
reciben su medicación a través de mensajero.
UNA VULNERABILIDAD QUE SE SUMA A OTRAS MUCHAS
El confinamiento pasará factura psicológica a toda la
población, independientemente del estado de salud mental previo. Una revisión
de investigaciones realizada por The Lancet y publicada en marzo
señalaba que las personas que fueron sometidas a cuarentena en epidemias
previas a esta crisis tuvieron más riesgo de padecer síntomas de estrés
postraumático (una dolencia que se observa en catástrofes o emergencias
caracterizada por pesadillas y flashbacks que reviven la situación
dañina, un estado de hipervigilancia, anestesia emocional y evitación de los
escenarios de la tragedia) además de irritabilidad, malestar, depresión, estrés,
agotamiento emocional y un estado de ánimo decaído. Y a más duración de la
reclusión, peores eran los efectos sobre la salud mental. “Nos queda una etapa
larga, porque luego habrá mucho estrés postraumático”, intuye Susana Mantas,
enfermera psiquiátrica y psicóloga del hospital Santa Catalina de Gerona. Los
autores del artículo de la publicación británica señalan que padecer una
enfermedad mental previa a la situación de confinamiento es un factor de riesgo
para sufrir síntomas de ansiedad y episodios de ira cuando concluye el periodo
de cuarentena. Otra publicación de The Journal of the American Medical
Association recalca la mayor susceptibilidad de los enfermos mentales a la
infección por coronavirus por cuestiones como las altas tasas de tabaquismo que
se dan en el colectivo y que causan peor pronóstico en caso de enfermar.
También destaca que dentro de la población sin techo, donde se dan muchas
patologías mentales, es difícil el control de la Covid-19, porque es más ardua
la identificación de la infección, su seguimiento y el adecuado tratamiento.
Comentario de María, una lectora que me sugirió pusiera lo que sigue:
ResponderEliminar"información en números verificados de la Organización Mundial de la Salud que proporcionó los datos a esta herramienta":
https://es.safetydetectives.com/novel-coronavirus-ncov-real-time-report/